Canarias IUSPORT

27 enero 2013

CUANDO UNA PATADA ES JUSTIFICADA

John Carlin comenta en EL PAIS un caso curioso. Dice Carlin: "uno cree que lo ha visto todo  en el fútbol. La victoria de Corea de Norte contra Italia en el Mundial de 1966; el  árbitro sudafricano que mató a un jugador con una pistola durante un partido en 1999; el  cabezazo de Zidane a Materazzi en la final de la Copa del Mundo de 2006...

Pero esta misma semana el deporte nos ha vuelto a asombrar, regalándonos otro incidente  insólito, sin precedentes. Ocurrió el miércoles y el escenario fue un partido de vuelta de  semifinales de la Capital One Cup, antes conocida como la Copa de la Liga, entre el  Swansea City y el Chelsea. El primer partido había acabado 0-2 a favor del pequeño equipo  galés y, a falta de 12 minutos para el final del segundo en el estadio del Swansea el  marcador seguía a cero. Pero los londinenses no perdían la esperanza de meter los dos  goles necesarios para ir a la prórroga. Eden Hazard, el talentoso centrocampista belga del  Chelsea, estaba especialmente convencido de que la hazaña era aún posible. Con lo cual  hizo algo por lo que se le recordará siempre que el deporte siga generando interés entre  los habitantes de nuestro planeta. Le dio una patada a un recogepelotas".